Quien me conoce sabe del poco amor que les tengo a los amistosos sin sentido. Hoy España ha jugado alguno de ellos. Y lo ha jugado mal, más bien Argentina no ha dejado que la roja jugase como sabe. Teníamos toque, pero no profundidad, y ellos a la contra nos hacían mucho daño con sus atacantes rápidos (y buenísimos, no lo olvidemos).
Pero esta entrada canta en contra de este tipo de partidos. Los encuentros amistosos sirven para prepararse para una competición: coger el tono físico de cara a empezar la temporada, conjuntar a un equipo nacional de cara a un torneo de selecciones... Pero no deben pasar de eso. ¿Qué sentido tiene un México-España a mitad de agosto y un Argentina-España ahora? Sonaré oportunista, pero siempre lo he pensado. Pues sirve este tipo de choques para sacar conclusiones que no llegan a ningún lado. Si ganas, eres buenísimo, por ello somos los campeones del mundo... "qué equipo, qué toque". Si pierdes, de forma clarísima como hoy,"hay equipo pero no entrenador" (esto es verídico, es un mensaje de un oyente del Tablero deportivo de Radio Nacional de España), "tendría que haber sacado a los titulares"... Total, que lo único que se consigue es o subir los humos o escupir fuego por la boca. Depende de un resultado que no es en absoluto vinculante. Ni nos quita la estrellita de encima del escudo ni nada, oiga.
Lo dicho, los amistosos, para prepararse.
Otro tema: habría que arreglar lo del parón este de Liga que hay entre primera y segunda jornada. No puede ser. Un amigo propuso que ya que las clasificaciones para Mundial y Eurocopa se disputaran durante dos temporadas, cada año, a mediados-finales de agosto y principios de septiembre se dispute una vuelta de la fase de grupos. Esto es: que la primera vuelta se juegue un año y la segunda otro. Y en septiembre tienes finiquitados los parones porque juegan las selecciones. La Liga empezaría más tarde, sí, pero iría toda seguidita.
Aquí el problema radica en las ligas que por factores climatológicos empiezan antes, que en Europa son la mayoría (Inglaterra, Alemania, Paises Bajos, Francia). Así que todo el párrafo anterior no sé hasta qué punto serviría. Quizá a ellos un parón transcurridas seis jornadas les duela menos, aunque sea de quince, veinte días (lo que duraría una de las vueltas de la fase de grupos clasificatorios jugando sábado-miércoles).
En fin, dejo de cavilar, que el fin de semana próximo vuelve la liga.
¡Nos vemos!
Y además, este amistosos de hoy en concreto ha servido para que los jugadores se reincorporen a sus equipos tarde y con casi treinta horas de vuelo a sus espaldas. Ahí es nada.
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